¿Debe ser mi novia mi máxima prioridad? ¿Cómo puedo amarla al máximo sin confundir mis prioridades (amistades, familia, estudio…)?

La vida está llena de elecciones. Desde que suena el despertador y decides posponer la alarma diez minutos más hasta que te acuestas después de haber contado a tu hijo una media de tres cuentos para que se durmiera.

Llama muchísimo la atención el elevado número de parejas que fracasan, se rompen y acaban haciéndose heridas afectivas imperdonables desde que comienzan a enamorarse. Entonces, ¿dónde está el problema? Pues todo comienza en elegir bien.

La psicóloga Meg Jay en su libro La década decisiva afirma que elegir bien o mal nos va a marcar la vida, ya que con esa persona vamos a tomar muchas nuevas decisiones sobre nuestro futuro.

Por eso, una vez que te enamoras y decides empezar a salir con esa persona que has elegido, ve despacio, no cometas el error de cerrarte solo a ella o él; porque la vida tomará aún más fuerza y color a su lado, comenzaréis a conoceros y podrás ir haciéndole partícipe de tus amigos, de tu familia, de tus aspiraciones personales y profesionales… y también comenzarás a descubrir su universo, y os gustará estar juntos, pero… no os ahogaréis juntos.

En este caso, si el noviazgo comienza a alejaros de vuestros amigos, familia y estudios y trabajo tendréis que valorar si se está convirtiendo en una relación tóxica. ¿Y cómo lo puedo saber? Escucha a las personas que te quieren y te dan buenos consejos. Reflexiona, toma aire y trata de ver si tu novio o novia te ayuda a abrirte al mundo o a centrarte sólo en él. Y si tienes esa sensación de ahogo, no tengas miedo de hablarlo. No olvides que tu novio/a no es tu cónyuge, las prioridades no pueden ser las mismas que cuando estáis casados. Hay un vínculo, un sacramento que lo marca todo. Y por supuesto que le da sentido a esa nueva prioridad que es tu esposo o esposa. Pero mientras llega ese SÍ grande y definitivo, solo estáis en proyecto.

Sé muy sincero. Es una característica que me encanta de la gente joven y que desgraciadamente comienza a perderse con el paso del tiempo… ojalá no sea así en tu caso y pelees siempre por hacer de la vida una continua aventura.

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